Los espacios que uno elige para vivir imprimen carácter y lo mismo sucede con aquellos lugares que elegimos como sede de nuestras vacaciones. Los hoteles y resorts suelen parecerse entre sí y, a menudo, suelen tener poco que ver con la arquitectura propia del destino en el que se ubican, perdiendo así parte del encanto que muchos viajeros buscamos cuando salimos de nuestro hogar hacia nuevos rincones que explorar.
Por eso, en Prinsotel, hemos trabajado en los últimos años para poder ofrecerte un hotel diferente, un hotel lleno de encanto en la zona norte de Mallorca, en uno de los rincones más tranquilos y exclusivos de Alcudia: el Prinsotel Mal Pas, en La Victoria. Hoy te lo presentamos orgullosos de poder ver un sueño hecho realidad, un alojamiento que conserva a la perfección la auténtica tradición mallorquina y que te trasladará a tiempos pasados sin renunciar a los mejores servicios de última generación.
La historia del Prinsotel Mal Pas nace sobre una casa señorial de arquitectura típica, con grandes jardines que miran al mar, ubicada muy cerca de las zonas de baño pero en altura, sobre una zona de colina que permite disfrutar de unas vistas espectaculares de la bahía de Pollensa.
La casa se ha restaurado con mucho cuidado para poder mantener todos los detalles que le dan ese carácter propio de esta zona de la costa norte de Mallorca: sus aires mediterráneos y nobles, su estilo marinero, sus paredes blancas que brillan bajo el sol de la isla combinadas con la calidez de las maderas y la terracota, la vegetación autóctona con la que se han rediseñado sus espacios verdes…
En su interior, además de respirar ese halo de historia que tienen todas las casas nobles mallorquinas, podrás disfrutar de habitaciones de gran categoría, con mobiliario de diseño moderno, natural y mediterráneo que combina perfectamente con el estilo vintage de sus zonas comunes. Los baños son nuevos, amplios y con todos los complementos necesarios de aseo y todas tienen bonitas vistas al entorno. Algunas incluso cuentan con una terraza doble, desde la que admirar la bahía de Pollensa.
La gastronomía es otro de sus puntos fuertes y no sólo por su calidad, sabor y variedad sino por sus espacios culinarios en los que podrás cenar bajo una pérgola de madera, en la zona exterior del gran caserón principal, rodeado de jardines y envuelto en ese ambiente de calma que solo el Mal Pas puede ofrecerte en Mallorca.
Pero, además de descansar y presumir de un espacio lleno de belleza tradicional, tendrás zonas para que los niños puedan jugar de forma segura, con columpios y toboganes, pista de tenis, piscina para adultos e infantil, zona solárium, área de fitness… Todo y más, con la garantía única de Prinsotel.